Los jóvenes y el Papa le dan más color a Río

"Vine a contagiarme su entusiasmo, es feo un obispo triste", dijo el Papa Francisco en español, ante una multitud de jóvenes que lo ovacionó con aplausos, saludos y cartas, en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud. Hubobaile, música y un desfile con ritmo de carnaval.

El papa Francisco en la playa de Copacabana, donde miles de jóvenes de los cinco continentes se reunieron para darle la bienvenida oficial a la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud. (EFE) 

El papa Francisco llegó en el papamóvil a la playa carioca de Copacabana, donde más de un millón de jóvenes de 180 países lo esperaron con globos, banderas y carteles, y quienes lo ovacionaron con cánticos, aplausos y saludos. (Reuters) 

“Siempre oí decir que a los cariocas no les gusta ni la lluvia ni el frío, pero ustedes están mostrando que su fe es más fuerte que el frío y la lluvia. Ustedes son verdaderos misioneros. Veo en ustedes la belleza del rostro joven de Cristo y mi corazón se llena de alegría”, dijo Francisco en medio de aplausos y ovaciones de fieles con pilotos. (EFE)

El Papa Francisco sostiene una bufanda de San Lorenzo de Almagro, el club de fútbol del que es hincha, durante su visita a la iglesia Sao Jerónimo Emiliani, en la favela Varginha de Río de Janeiro. (AFP) 

El Papa Francisco sostiene una bandera argentina afuera de la Catedralde Río de Janeiro sonde se reunió con jóvenes argentinos. (Reuters) 

“Hagan lío en las diócesis”, les pidió Francisco a los miles de jóvenes argentinos que lo escucharon entre aplausos y ovaciones en la catedral de Río de Janeiro. Además, los llamó a “hacerse valer” y no dejarse excluir. (AFP)

El Papa Francisco llega a la favela Varginha, perteneciente al complejo Manguinhos, a unos 18 kilómetros del centro de Río de Janeiro y donde viven unas 45.000 personas. El Papa visitó primero la pequeña capilla de San Jerónimo, entró a la casa de Don Manuel, un vecino y dio un discurso en una cancha de fútbol de la comunidad. Hizo detener el papamóvil varias veces para saludar a su paso.

Seguidores del Papa Francisco invaden las calles de Río de Janeiro y siguen al Pontífice por todos lados. (EFE/David Fernández)
Fuente: Clarín