Viaje al infernal Valle de la Muerte

Los meteorólogos tienen la mirada puesta estos días en el Valle de la Muerte de California, ante la expectativa de que el mercurio bata un nuevo récord en ese lugar a causa de la intensa ola de calor que está afectando el noroeste de Estados Unidos.

En este inhóspito paraje situado en el desierto del Mojabe, en California, el 10 de julio de 1913 el termómetro marcó la temperatura más alta jamás registrada: 56,7° C.

El Valle de la Muerte recibe su nombre de los aventureros que se atrevieron a cruzarlo a principios del siglo XIX atraídos por la fiebre del oro

La cuenca de Badwater es la atracción más emblemática del valle. Situado a 85,5 metros por debajo del nivel del mar, este lugar es el punto más bajo de Norteamérica.

Las precipitaciones anuales en la cuenca -cuya superficie está cubierta por una gruesa capa de sal- no alcanzan los 50 milímetros y algunos años no ha llovido en absoluto.

Además de ser el punto más bajo de Norteamérica, es uno de los lugares más secos y calientes del mundo.

El calor infernal que se registra en Badwater tiene mucho que ver con la geografía del lugar. Según los meteorólogos, aquí se dan las temperaturas constantes más altas de la Tierra.

El domingo pasado este termómetro metido dentro de una sartén marcaba una temperatura de 153º F (70° C).

En Furnace Creek el 10 de julio de 1913 el mercurio alcanzó la temperatura que, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), es la más alta jamás registrada. Este domingo las temperaturas oscilaban entre 126º F y 128º F (alrededor de 53º C).

En 1933 el Valle de la Muerte fue declarado monumento nacional y en 1994 recibió el título de parque nacional.
Fuente: BBC